La cocina española es conocida por su amor por los sabores picantes y una de las principales razones de esto son sus variadas variedades de pimientos. Desde los clásicos pimientos de Padrón hasta los más intensos pimientos de Cayena, cada uno tiene su propio sabor y uso en la cocina. Empecemos con el famoso pimiento de Padrón, que se caracteriza por su sabor suave y su textura crujiente. Son perfectos para ser salteados en aceite de oliva con un poco de sal y servidos como un delicioso aperitivo o acompañamiento. También están los pimientos de Guindilla, que son más pequeños y delgados que los pimientos de Padrón, pero tienen un sabor más picante y se usan comúnmente en platos de carne y mariscos. Si quieres un poco más de picante, los pimientos de Cayena son ideales. Son pequeños pero poderosos y se usan en platos como gambas al ajillo o en salsas para darles un toque picante. Y no podemos olvidar los pimientos de Jalapeño, que son perfectos para añadir un poco de calor a tus platos mexicanos favoritos. Y por último, pero no menos importante, están los pimientos de Piquillo, que son populares en la cocina española por su intenso sabor dulce y su uso en platos como el bacalao a la vizcaína. Ahora que conoces las distintas variedades de pimientos, ¡atrévete a añadir un poco de picante a tus platos y disfruta de las delicias de la cocina española!
